Blogia
Haddharamma

Sigo vivo (2005 DJ Torrolex Remix)

No sé si a estas alturas me quedará algún lector leyendo esto. Y si es así, no sé qué le sorprenderá más: si ver una nueva entrada en esta bitácora moribunda, o encontrar con ello una prueba (no concluyente) de que sigo vivo.

Pues sí, vitito. ¿Por qué este prolongado silencio bitacorífero? Confesemos por partes. Desde hace unos meses he sumado una nueva adicción: estoy enganchado al cine en casa. Allá por octubre descubrí tres cosas:

  1. Las delicias de mover el reproductor de DVD al dormitorio. Lo tenía en el salón, donde no me sentía cómodo viendo películas, por diversos motivos: por la contaminación de ruidos, porque no hay ningún sillón cómodo cerca del televisor donde explayarme, y porque le tengo cierta manía a la habitación, que sólo uso para recibir visitas (como Franco con el Palacio de Oriente). Ahora está muy de moda eso del cine en casa, pero yo he dado un paso más y he me montado el cine en cama: kit compuesto de reproductor DVD, TV (por ahora de 21 modestas pulgadas), ampli (vetusto pero decente), cascos orejones y, cuando viene Inma, añado un par de altavoces hi-fi ochenteros tamaño king-size. Claro, y el ingrediente esencial: cama de 150 con colchón duro, respaldo acolchado, almuadones cómodos y hueco fijo en la mesita de noche para los mandos a distancia.


  2. La sección de DVD de la fnac de La Cañada. Decenas y decenas de duvedeles apetecibles a precios razonables. Puedo consultar cómodamente desde casa en la web y llegar a la tienda con la preselección hecha, lo que me deja tiempo para curiosear y nerdear. Mi problema: me gustan demasadios géneros (o más bien debiera decir nichos): ciencia ficción casposa, cine de autor, clásicos, sátira pata negra, algunas series de TV... Y encima Inma me ha ido seduciendo hacia alguno más, como el musical clásico.


  3. La mayor videoteca del mundo: eMule. Es como una carta de los reyes magos donde puedes pedir todo lo que quieras, con la única regla de que los regalos te van llegando poco a poco. Puedes encontrar aquellas rarezas que sólo viste una vez y no encuentras ni en la fnac, como Naves Misteriosas o El ataque de los tomates asesinos. Y a un precio insuperable.


En fin, que me hallo auto-abducido por mi nueva adicción recién estrenada, a costa de otras dedicaciones. No sólo la bitácora, también llevo meses sin leer un libro (aunque sigo un par de revistas mensuales: PC Actual y Revista Foto), renuncié a los tres días mi propósito de salir a hacer ejercicio por las mañanas, tengo abandonada la fotografía (incluyendo carretes sin revelar, un pecado mortal porque la imagen latente se va desvaneciendo) y sigo teniendo el disco duro reventando de emepetreses por falta de tiempo para hacer compilaciones en CD y liberar algo de espacio.

Pero hay otros obstáculos más directos que mantienen gangrenado mi proyecto personal de la bitácora. Siempre he sido lento haciendo casi todo (y mira que lucho contra ello), porque soy indeciso y doy muchas vueltas para concretar algo, y por mi meticulosidad compulsiva (pero ésta es otra historia y hoy no hablaré de ello). Y claro, también soy lento escribiendo. Muchos artículos se me han quedado en el tintero (bueno, para ser más exactos en el xemacs), porque después de varios días dándoles vueltas he perdido la ocasión de la oportunidad, o sencillamente he acabado por aburrirme.

Pero es que encima no estoy nada contento con el resultado. Tiendo a ser exahustivo escribiendo (más haciéndo un análisis desglosado que contando una historia), no logro arropar lo que quiero contar con una mínima calidad literaria, ni crear un interés por lo escrito. Así que mucho esfuerzo para muy poco. Frustración, que le llaman.

Después de esta pública confesión de pecados con propósito de catársis sigo sin sentirme mejor, pero al menos he dado noticias de vida, y de paso así publico algo con lo que estrenarme este año. Aunque sólo sean excusas.

Así que... ¿hasta el año que viene?

Por cierto, por curiosidad, ¿queda todavía alguien ahí?

9 comentarios

Epaminondas Pantulis -

Tyranno: No sólo he visto tus fotos en Flickr sino que te he agregado como contacto. Iba a poner tu dirección, pero mejor pongo la mía:

http://www.flickr.com/photos/pantulis/

Haddhar -

¿Por qué no nos lo pones más fácil y nos das el enlace? 8^)

Tyrannosaurus Reflex -

Yo me he propuesto poner un post todos los años y... en fin... todavía me queda tiempo para cumplir...

Por cierto, feliz año Sres. Juan Johnny y Lupi O'Brien...

P.S. ¿Me habeis buscado en flick?

Haddhar -

Dr. Pepix: gracias por el halago. Me estáis dando ganas de continuar 8^) . Y me sumo a la petición de E.P.: en ocasiones se echa de menos la oportunidad de poder dejar algún comentario en tu BLO. Claro que seguramente tú echaras aun más de menos el disponer de un interfaz de publicación algo más directo. Por cierto, qué BD utilizas, ¿Postgres o MySQL?
Pero no nos lo cuentes ahora, cuéntalo en EOdT.

Epaminondas Pantulis -

Pues lo de comentar en tu BLO lo he echado en falta recientemente, no creas :-)

Y lo del "making of" el BLO sí que puede ser interesante.

DrPepix -

"Damn it Bones. I need you. Badly." (ST:TMP)

Sin tu blog, la blogosfera no sería lo mismo. Por cierto, yo estoy más o menos escribiendo un par de veces por semana en mi BLO. A ver si mantengo el ritmo y todo eso.

Y a ver si termino de construirlo, que sólo está el modo de visualizar, y para añadir artículos tengo que hacerlo directamente en la base de datos... si además hiciera el módulo de añadir comentarios, sería para nota :)

Tal vez publique un día de estos en una bitácora técnica compartida que vosotros conocéis la aventura de fabricarse un BLO uno mismo... :)

Haddhar -

Gracias, me lo tomaré como un halago. Tal vez tú tampoco estés satisfecho con tus resultados, pero tienes el don de la rapidez, y al menos no te roba tanto esfuerzo, con lo que el balance final no te resultará tan negativo. De todas formas espero no dejar morir mi bitácora. Yo maduro lentamente.
Por cierto, ¿de quén es la cita? ¿Lovecraft? ¿Shakespeare? ¿Jesulín de Ubrique?

Epaminondas Pantulis -

Yo no estoy tampoco nada satisfecho con mi bitácora. La cuestión no es alcanzar la perfección formal: la cuestión es que no te importe, como a mí.

Prefiero que escribas una entrada zarrapastrosa cada día (o cada semana, o cada quincena, o cada mes), que encontrarme con esta bitácora cerrada.

Epaminondas Pantulis -

"That is not dead which can
eternal lie, and with strange aeons even death may die."

Pues eso.