Achtung Babies
Anoche volví tarde a casa. Buscando en la tele algún canal con música para escuchar mientras leo (para mi acostarme sin leer algo es como acostarse sin cenar), me encuentro con U2. En los conciertos de Radio 3. Ante un público tan selecto (=escaso). ¡Caramba, a ver si va a ser verdad que vamos camino de convertirnos en un país del primer mundo!
Me fijo mejor y veo a Bono muy cambiado. "Este chico está muy delgado". Será el desgaste de la gira. Uy, The Edge sí que está distinto. Espera, ese no es mi The Edge, me lo han cambiado. Pero se le parece, viste, se mueve y toca como The Edge. El batería es Larry Mullen, lo delata su pinta de macarra. El bajo fue la clave: no se parece a Adam Clayton ni metido en un saco. Los títulos al final de la canción sentenciaron la cuestión. Eran los Achtung Babies.
Es un grupo de culto a U2. Tanto que son un clon. El cantante se parece a Bono hasta el extremo que te tiras varios minutos debatiéndote: "No, tiene la cara más alargada. Que sí, que es, esa mirada picarona... Pues de lejos no se parece tanto como de cerca. Pero si tiene el mismo pelo..." La voz se parece (al menos para un no-fan como yo), es que lo clava. Las inflexiones, grititos, falsete, el tono grave y sensual. Los gestos y ademanes, las poses, la forma de coger el micro, y por supuesto la estética: greñas, ropa negra, pendientito... todo.
Cada músico encarna a su alter ego. El parecido físico del guitarrista con The Edge era menor, pero con el gorro calado a rosca -estilo Lina Morgan-, la perilla y la mirada perdida como en otra dimensión, daba el pego. El batería también cumplía bastante bien.. El bajo es el que más canta (retóricamente hablando).
Tocaban, por supuesto, el repertorio de U2. Y sonaban como U2. Quizá al guitarra no se le notaba tan suelto como a The Edge, pero aceptamos barco.
La verdad es que me gustaron bastante, y estuvo muy bien poder escuchar a U2 antes de dormirme. Aunque no fueran U2.
Me fijo mejor y veo a Bono muy cambiado. "Este chico está muy delgado". Será el desgaste de la gira. Uy, The Edge sí que está distinto. Espera, ese no es mi The Edge, me lo han cambiado. Pero se le parece, viste, se mueve y toca como The Edge. El batería es Larry Mullen, lo delata su pinta de macarra. El bajo fue la clave: no se parece a Adam Clayton ni metido en un saco. Los títulos al final de la canción sentenciaron la cuestión. Eran los Achtung Babies.
Es un grupo de culto a U2. Tanto que son un clon. El cantante se parece a Bono hasta el extremo que te tiras varios minutos debatiéndote: "No, tiene la cara más alargada. Que sí, que es, esa mirada picarona... Pues de lejos no se parece tanto como de cerca. Pero si tiene el mismo pelo..." La voz se parece (al menos para un no-fan como yo), es que lo clava. Las inflexiones, grititos, falsete, el tono grave y sensual. Los gestos y ademanes, las poses, la forma de coger el micro, y por supuesto la estética: greñas, ropa negra, pendientito... todo.
Cada músico encarna a su alter ego. El parecido físico del guitarrista con The Edge era menor, pero con el gorro calado a rosca -estilo Lina Morgan-, la perilla y la mirada perdida como en otra dimensión, daba el pego. El batería también cumplía bastante bien.. El bajo es el que más canta (retóricamente hablando).
Tocaban, por supuesto, el repertorio de U2. Y sonaban como U2. Quizá al guitarra no se le notaba tan suelto como a The Edge, pero aceptamos barco.
La verdad es que me gustaron bastante, y estuvo muy bien poder escuchar a U2 antes de dormirme. Aunque no fueran U2.
2 comentarios
Yuly -
Alessia -