Blogia
Haddharamma

Habemus piso

Después de tres semanas buscando tenía dos opciones: pájaro en mano o ciento volando. O seguir buscando esperando a encontrar el piso perfecto al lado del trabajo, o quedarme con la mejor opción de entre lo visto. Al final me decidí por el pájaro.

La elección ha sido difícil. Hay un umbral de 400€ del que es casi imposible bajar. Por esta cantidad se puede encontrar algún apartamento en la periferia. Si encuentras algo más barato tiene un porqué: es muy viejo, o pequeño, o está muy mal conservado, o está lejos y mal comunicado, o en un barrio chungo. O todo ello junto. Si te vas hacia el centro hay más oferta de apartamentos pero son más caros. Hacia la periferia sólo hay pisos. La única forma de bajar significativamente la renta es compartir un piso, opción que no me planteo porque soy muy mío, porque quiero estar a mi aire con Inma, y porque además de piso tendría que compartir gatos. Al final me decidí por el piso en Sevilla Éste que tenía apalabrado desde hace dos semanas, y por el que me habían hecho una buena oferta (competitivamente hablando, es decir, viendo cómo está el mercado). La diferencia en precio con un apartamento es relativamente pequeña, pero en metros y calidad es enorme.

El viernes firmé el contrato de alquiler -- y aflojé un dineral. El casero resultó ser un profesor evangelista (¡!), casado aunque sospechosamente modosito (¡¡!!), y de hecho tenía el piso decorado con cuadros con salmos (¡¡+argh!!!), que obviamente han ido derechitos al trastero. Ha sido muy atento y ha arreglado por propia iniciativa un montón de cosas, además de dejarme el piso bastante bien equipado. Lo cual de entrada es un buen signo. Además de religioso parece bastante de derechas (adjetivos que cada vez cuesta más separar), así que evité entrar en política, filosofía y por supuesto mi pecaminosa relación con Inma. Se trata de llevarse bien con él, no de tener confrontaciones. Con que me deje el piso en condiciones, puede quedarse con sus principios conservadores.

El piso tiene tres dormitorios, un salón espacioso, una cocina grande con lavadero/despensa, baño + aseo, terraza cubierta para tomar el aire, y plaza de garaje. La zona está bien, es tranquila, las avenidas son anchas, está bien comunicada y relativamente cerca del trabajo (aunque el tráfico fosilizado a las 7:30 convierte los 8 minutos en 30). Lo único que no nos ha gustado es la cama-bañera con su correspondiente colchón chicloso (en los que probablemente se habrçan engendrado dos generaciones de Martínez), y los juegos de cama desgastados que muestran huellas testimoniales de su larga vida de servicio.

Ayer empecé a mudarme. Cargamos mi Almera y el Punto de Inma hasta arriba y nos trajimos media casa: tres maletones, una TV de 21", ordenador completo (con mesa, silla, altavoces y demás complementos), horno microondas, media cocina, medio baño, dos sillas plegables... Se quedaron esperando su turno hasta el próximo finde la mesa de centro elevable, la cama y otro surtido cuétara de material doméstico diverso (todo ello en la Berlingo de mi padre, claro). Y sí, lo sé: debería traerme lo _mínimo_. Pero ya me conocéis, tengo mucho apego a mis trastos, y de todas formas tengo que ir desalojando el piso de Torremolinos (que pasará a disfrutar mi hermana Susana).

Inma se ha venido esta semana a echarme una mano con la instalación. Ayer por la tarde, subimos toda la carga (una compleja operación logística), y mientras ella instalaba media cocina, yo me encargaba de la TV, la mesa del ordenador, y la instalación de emergencia en el baño y el dormitorio. Entre hoy y mañana probablemente terminemos de acomodarnos.

Esta mañana he descubierto que el piso tiene unas vistas estupendas a un precioso amanecer sobre los jardines del Guadalpark. Ni recuerdo la última vez que vi amanecer (creo me pilló conduciendo en direción oeste).

Eso sí, se me ha hecho cuesta arriba tener que salir al frío húmedo de la calle a las 7:30 para ir a currar, dejando a Inma en casa como una reina acostada en el sofá viendo la TV bajo una manta calentita... (aunque mi niña se lo merece).

5 comentarios

Haddhar -

Gracias a todos por las enhorabuenas :)

Ana+ -

¡Enhorabuena por lo del piso :)! Por lo que cuentas tiene muy buena pinta. Hala, ahora aprovecha la experiencia del Ikea y a dejar el piso mo-ní-si-mo. Y muchos recuerdos a Inma.
Ah, y aprovecho para felicitar a quién T.R. ya sabe por la próxima lectura de la tesis. Ánimo que eso está controlao.

Haddhar -

Por ahora duermo bien en la cama-bañera, pero es sobre todo por agotamiento. Demasiado que hacer estos días.

Tengo una cama y un colchón estupendos de 1.50m que estoy pensando en traerme desde Málaga en la Berlingo de mi padre.

Epaminondas Pantulis -

Eso digo yo: que sea enhorabuena. Lo del colchón, de acuerdo con TR, es básico.

No sé si lo habrás hecho (creo que es reglamentario en el contrato de alquiler) pero conviene que acordar con el casero una lista de mobiliario y cosas de la casa y su estado, para que cuando liquides el contrato no te venga con cosas como "¿donde está el piano que yo tenía?"

Y, claro, todo lo que no esté en esa lista, puede ser convenientemente desechado.

Tyrannosaurus Reflex -

Que sea enhorabuena. En cuanto a lo del colchón, yo no me lo pensaría dos veces antes de invertir algunos eurillos por mi cuenta en "ciertas" cosas.
Hasta el finde estaremos un poco ocupados por la tesis, ya que esta semana debe salir en dirección hacia la imprenta pero de cualquier forma te echaré un telefonazo para ver qué podemos arreglar...
Un abrazo para los dos.